- Baches Persisten Alrededor Del Volcán Universitario
- Promesas Incumplidas Y Falta De Intervención Visible
- Impacto En La Comunidad De La UANL Y En Aficionados De Tigres
- Volcán Universitario En Espera De Atención Real
La situación del Volcán universitario volvió a generar preocupación entre estudiantes, maestros y aficionados debido al deterioro constante del estacionamiento que rodea el recinto. A pesar de las promesas realizadas hace meses, los baches continúan creciendo en una zona utilizada diariamente por la comunidad de la UANL, mientras el anuncio de remodelación hecho por Samuel García sigue sin concretarse.
Baches Persisten Alrededor Del Volcán Universitario
El deterioro en el estacionamiento del Volcán universitario se ha convertido en un problema visible y constante. En sus alrededores, los pozos aumentan en número y tamaño, afectando a quienes transitan por los carriles y cajones del área. La UANL, que alberga diversas facultades en la zona, ha recibido comentarios de profesores y estudiantes preocupados por los riesgos que representan estas fallas en el pavimento.
Aunque hace tres meses autoridades universitarias aseguraron que los baches serían reparados en un corto plazo, la realidad en el lugar muestra lo contrario. Los pozos no solo persisten, sino que han empeorado. Esta situación afecta la movilidad, la seguridad vehicular y la imagen de un espacio emblemático para la comunidad universitaria y deportiva.
De acuerdo con observaciones realizadas en campo, los daños destacan principalmente en los accesos hacia Avenida Manuel L. Barragán y en zonas cercanas a facultades como Biología, Química e Ingeniería Civil. Además, algunos tramos presentan ausencia total de carpeta asfáltica.
Promesas Incumplidas Y Falta De Intervención Visible
El compromiso de atender el deterioro del Volcán universitario se anunció públicamente el 19 de agosto, cuando se informó que los “volcancitos”, como los llamó la comunidad, serían reparados en un corto plazo. Sin embargo, tres meses después, los cambios son prácticamente nulos.
La UANL señaló en ese entonces que el mantenimiento del estacionamiento corresponde a Sinergia Deportiva, entidad responsable del estadio y sus alrededores. No obstante, la falta de intervención ha provocado que la problemática avance.
En uno de los carriles principales que conectan con Avenida Pedro de Alba, tres baches de gran tamaño representan obstáculos considerables para automovilistas. En otras áreas, incluso las que fungen como cajones de estacionamiento, la superficie está fracturada o totalmente degradada.
Asimismo, mientras la mayor parte del estacionamiento muestra deterioro significativo, se observó que únicamente el acceso donde estacionan jugadores y directivos de Tigres recibió reparaciones parciales. Esta disparidad en las intervenciones ha generado cuestionamientos sobre las prioridades en el mantenimiento de las instalaciones.
Impacto En La Comunidad De La UANL Y En Aficionados De Tigres
El estado del estacionamiento del Volcán universitario afecta a varios sectores de la población. Por un lado, estudiantes y maestros de la UANL que utilizan diariamente las instalaciones se han visto obligados a maniobrar entre pozos profundos, con riesgo de dañar sus vehículos o sufrir accidentes al caminar en zonas deterioradas.
Por otro lado, las y los aficionados que acuden a los partidos de Tigres y de las “Amazonas” enfrentan problemas similares. El acceso al estadio, que debería contar con condiciones adecuadas por ser uno de los puntos deportivos más importantes del estado, refleja un abandono incompatible con el flujo constante de personas que visitan la zona.
A pesar de estas afectaciones, no se ha anunciado una fecha oficial para las reparaciones ni se ha informado sobre un plan de mantenimiento integral.
Este escenario contrasta con declaraciones previas de Samuel García, quien anunció una futura remodelación del estadio hace meses. Sin embargo, dicho proyecto no ha presentado avances visibles ni comunicación actualizada, lo que añade incertidumbre sobre el futuro del recinto.
Una Problema Que Se Expande En El Volcán Universitario
El deterioro del Volcán universitario no se limita a áreas pequeñas. En los alrededores, especialmente en la zona poniente hacia Manuel L. Barragán, los daños se han expandido. La superficie muestra grietas, hundimientos y baches profundos, indicadores de una falta de mantenimiento prolongada.
En otras zonas, el asfalto ha desaparecido por completo, dejando expuestos tramos que representan riesgos para suspensiones de vehículos, motociclistas y peatones. Además, el tránsito cotidiano contribuye a que los pozos aumenten de tamaño, lo que hace la reparación más compleja y costosa.
Incluso ante este panorama, no se ha informado sobre un proceso de evaluación técnica ni sobre un presupuesto asignado al mantenimiento. La UANL, por su parte, no ha actualizado públicamente el estatus del compromiso adquirido en agosto, lo que mantiene la preocupación entre la comunidad.
Falta De Claridad Sobre Planes De Renovación Estadio
Aunque hace meses se anunció un proyecto para renovar el Volcán universitario, no existe claridad sobre los avances o la factibilidad de este plan. Los anuncios iniciales generaron expectativas entre la afición de Tigres y la comunidad universitaria, pero la falta de acciones concretas ha generado dudas.
El deterioro actual contrasta con la visión de renovación presentada por Samuel García. Sin una intervención en el corto plazo, el recinto podría continuar su desgaste, afectando no solo la experiencia deportiva sino también la infraestructura universitaria circundante.
Además, el abandono visible también ha alimentado debates sobre prioridades en la gestión pública y la coordinación entre autoridades estatales, Sinergia Deportiva y la UANL.
Volcán Universitario En Espera De Atención Real
El estado del Volcán universitario refleja una falta sostenida de mantenimiento y una ausencia de claridad en los proyectos anunciados. El deterioro avanza en zonas clave del estacionamiento, afectando a estudiantes, docentes y aficionados sin que exista un calendario oficial de reparaciones.
En espera de soluciones, la comunidad universitaria sigue enfrentando baches cada vez más profundos, pozos que se multiplican y un entorno que evidencia abandono.
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